Pechuga de cerdo estofada con colmenillas y nueces de ginkgo
Una vez probé colmenillas estofadas en un restaurante rústico en Dali, y su sabor duradero me dejó una impresión profunda. Basándome en mis recuerdos, modifiqué la receta e incorporé mi nostalgia por los paisajes pintorescos de Dali en este plato de pechuga de cerdo estofada.
Ingredientes
Pasos
Remoje las colmenillas en agua fría durante una hora, luego enjuáguelas bien.
Prepare todos los ingredientes. Escalde y limpie la pechuga de cerdo, luego córtela en trozos pequeños. Enjuague las nueces de ginkgo y resérvelas.
Corte el jengibre en rodajas y pique finamente los dientes de ajo.
Hervir agua, agregar vino para cocinar y escaldar la pechuga de cerdo. Sáquela, enjuáguela y déjela escurrir.
Caliente una sartén y añada aceite. Cuando el aceite esté caliente al 60 %, agregue la pechuga de cerdo y fríala hasta que libere un poco de grasa. Retírela y resérvela.
Agregue al aceite restante una pequeña cantidad de trozos de chile seco, pimienta de Sichuan, rodajas de jengibre, ajo picado y pasta de frijoles de Pixian, y sofríalo hasta que desprenda fragancia.
Añada la pechuga de cerdo y sofría uniformemente. Agregue un pequeño bol de agua, vino para cocinar, especias, pimienta blanca molida y salsa de estofado o salsa de soya. Lleve a ebullición a fuego alto, cubra y cocine a fuego bajo hasta que esté algo tierna (~40-60 minutos).
Agregue las colmenillas y las nueces de ginkgo, mezcle bien y añada suficiente agua. Lleve a ebullición a fuego alto y luego cocine a fuego lento durante media hora a fuego bajo hasta que se impregnen los sabores. Ajuste el gusto y reduzca la salsa antes de servir (La pasta de frijoles de Pixian es bastante salada, así que pruebe antes de añadir sal. Si usa salsa de soya para guisos, ajuste la dulzura con azúcar si es necesario).
El plato es de color rojo brillante, tierno, sabroso, con un toque dulce y un regusto duradero.