[Asesino de arroz: Mejor que el plato de restaurante Pollo Kung-Pao] (Versión suave y no picante)

Corte el pollo en cubos, agregue 1 cucharada de fécula, cebolla de verdeo picada, jengibre rallado y vino de cocina. Mezcle bien y marine durante 15 minutos.

Prepare las guarniciones: Corte el pepino y la zanahoria en pequeños cubos y fría el maní hasta que esté crujiente para usarlos más tarde.

Saltee ligeramente los cubos de pollo en una sartén fría con aceite hasta que estén apenas cocidos y resérvelos.

En otra sartén con aceite caliente, saltee cebolla de verdeo picada y ajo hasta que liberen su aroma. Agregue los cubos de zanahoria y saltee hasta que estén casi cocidos. Asegúrese de cocinar bien las zanahorias para liberar las vitaminas liposolubles y el betacaroteno. Cuando el aceite se vuelva anaranjado, agregue los cubos de pepino y los cubos de pollo cocidos previamente y saltee brevemente. (En este punto, no lo cocine demasiado tiempo, ya que quiero preservar la dulzura fresca del pepino para un sabor más rico). Prepare la salsa de la siguiente manera: Mezcle 1/2 cucharada de fécula, 2,5 g de sal (equivale a aproximadamente medio tapón de una botella de soda), alrededor de 2 cucharadas de azúcar, 1,5 cucharadas de vinagre (use menos si es vinagre envejecido, ya que es más ácido), 2 cucharadas de salsa de soya, unas gotas de salsa de soya oscura, un toque de salsa de ostras, una pizca de polvo de caldo de pollo/GMS, 1 cucharada de ketchup, cebolla de verdeo y una cantidad adecuada de agua. * Puede ajustar las cantidades según su gusto.

Vierta la salsa, hierva brevemente y reduzca el agua. Pruebe para ajustar la sal si es necesario. Finalmente, agregue el maní crujiente.

¡Sirva y disfrute! ¡Buen provecho!