Galettes de harina de boniato y arroz glutinoso

Cocine al vapor los boniatos. Para boniatos pequeños, bastará con cocinarlos al vapor a fuego medio durante unos 20 minutos tras hervir el agua. Pélalos una vez cocidos.

Machaca los boniatos cocidos hasta formar un puré (yo utilicé guantes desechables y los machaqué a mano).

Prepara la harina de arroz glutinoso y el puré de boniato. Normalmente, la proporción de boniato a harina de arroz es de 2:1. Si prefieres una textura más elástica, puedes aumentar la cantidad de harina de arroz, pero nunca excedas una proporción de 1:1.

Mezcla la harina de arroz glutinoso con el puré de boniato hasta que obtengas una textura granulada. Nuevamente usé guantes desechables y mezclé con las manos, nada es tan efectivo como las manos.

Añade agua y amasa hasta obtener una masa homogénea. La cantidad de agua puede variar significativamente dependiendo del contenido de humedad de los boniatos y de la capacidad de absorción de diferentes harinas de arroz. La consistencia correcta permite formar una bola suave que no se rompe al presionarla. Cubre la masa con film transparente y déjala reposar durante 20 minutos.

Divide la masa en 8 porciones, enrolla cada porción en una bola y luego aplánala para formar pequeños discos.

Unta un lado del disco con agua y espolvorea con semillas de sésamo blanco (sin agua, las semillas no se pegarán). Si lo deseas, puedes mezclar semillas de sésamo blanco y negro para un aspecto más vistoso.

Calienta un poco de aceite en una sartén plana y coloca los discos con el lado del sésamo hacia arriba. Fríelos durante aproximadamente 1 minuto a fuego medio-bajo.

Dale la vuelta al disco y fríelo durante otro minuto.

Finalmente, vuelve a darles la vuelta, añade 1 cucharadita de agua (aprox. 10 g) en la sartén y cubre inmediatamente con una tapa. Déjalo cocinar al vapor durante 2 minutos, vuelve a girar el disco, añade un poco más de agua y cocina al vapor durante otros 2 minutos. ¡Tus discos estarán listos!